Que esa paz y esperanza que deseamos llevar al mundo, se sienta bien fuerte primeramente en nuestros propios corazones. Les deseamos una hermosa noche buena y una feliz navidad, sirviendo con el alma a aquel a quien amamos y representamos. Que disfruten al hablar con sus familias y que sientan su cercanía a la distancia. Testificamos de la realidad de que el Salvador vino al mundo y lo hizo como parte de un plan inmenso, un plan para todos los hijos de Dios.
Él nos ama hace mucho tiempo y lo hace con un amor perfecto y eterno. 
Sinceramente,
 Familia Kähnlein.